Odiar los lunes es un síntoma de que algo mal anda en tu vida
Durante varios años, el lunes era el horrible inicio de una semana más. Un día de una hueva tremenda.
Saber que ese día toda la función volvía a comenzar me daba una pesadez insoportable. Esto poco a poco se fue haciendo una costumbre y aprendí a vivir con ello…..como millones de personas más.
Al hacer un poco de introspección, me di cuenta de que lo que sentía cada lunes era una señal que me quería decir algo…..sólo que no me había dado la oportunidad de escucharla realmente.
Cuando por fin lo hice, me quedó clarísimo que no había necesidad de odiar ningún día de la semana y que, si lo hacía, algo tenía que andar muy mal con mi vida y tenía que cambiarlo.
Me cayó el veinte que odiar los lunes era en realidad algo ANORMAL porque, al final de cuentas, cada día que vivimos es irrepetible y deberíamos estar agradecidos por el simple hecho de estar vivos. Pude ver que lo que odiaba en realidad era mi empleo y la vida mediocre que tenía.
Si tan sólo pudiera tener otra fuente de ingresos, pensaba; si no necesitara el ingreso de este mediocre empleo, me repetía….
Lo que no entendía muy bien en ese entonces era que el dinero es algo que llega por sí solo cuando generas valor a otras personas.
Sin saberlo, comencé a dar pequeños pasos para generar ingresos laterales. Es decir, maneras de hacer dinero además de lo que ganaba en mi empleo de oficina.
Comencé a devorar y a escuchar incansablemente libros y podcasts de negocios. Se me fue metiendo en la cabeza la idea loca de hacer dinero a través de negocios electrónicos.
Esta idea no se me ocurrió de la noche a la mañana ni por casualidad, fue sembrada en mi por varios mentores virtuales a través de libros y podcasts de negocios electrónicos, principalmente de Tim Ferris (libro 4 Hour Work Week), Pat Flynn (The Smart Passive Income blog/podcast), Spencer Haws (Niche Pursuits blog/podcast), Chris Guillebeau (libros $100 Startup y Born for This) y Nathan Hartnett (ecommerceuncovered blog, y el libro Retail Rebelion).
Después de un par de años de aprender un montón de cosas, decidí que quería generar ingresos a través de negocios electrónicos. Me encantó la idea poder hacer dinero estando en cualquier lugar, es decir, sin que mi presencia física fuera necesaria. Ganar dinero incluso mientras duermes era un sueño para mi.
Esto era algo indispensable debido a que, en ese momento, pasaba 5 días a la semana atrapado en mi cubículo.
Dos años después, pude por fin suplir el ingreso de mi empleo de oficina a través de negocios electrónicos
Ahora los lunes son simplemente un día más de la semana, con la diferencia que puedo hacer más cosas, como llamar a personas y utilizar servicios que solo trabajan de lunes a viernes.
Disfruto cada día de igual manera, sin importar si es sábado o martes. Incluso hay días en los que me sorprendo a mi mismo verificando si es lunes o jueves, martes o miércoles.
Estoy convencido que los negocios electrónicos es algo que llegó para quedarse y que apenas está en sus inicios. Soy una prueba viviente más de que funcionan no solamente en países como Estados Unidos o Reino Unido, sino que se puede ser exitoso en cualquier parte del mundo, incluso en un país tercermundista como el mío. Vivimos sin duda en una era de oportunidades ilimitadas.
Inicié este blog en 2014 para dar a conocer negocios electrónicos que pueden ayudar a otras personas a generar ingresos laterales para poder dejar sus empleos si así se lo proponen. Al mismo tiempo, aprendo muchísimo de las personas que me leen porque me recomiendan negocios, libros, podcasts, personas, herramientas y muchas otras cosas más que no habría conocido de no ser por ellos. Se trata, pues, de una relación ganar-ganar.
Por último, saber que podré estar presente cuando mi primer hija nazca en un par de meses y poder pasar con ella y mi esposa todo el tiempo que me de la gana sin tener que preocuparme por pedir permiso a nadie y organizar mi agenda para cuidarlas y disfrutarlas al máximo, es algo que no tiene precio.
Por si esto fuera poco, ahora gano más que lo que ganan mis ex-jefes en sus empleos de oficina. ¡No podría estar más feliz!
LA foto del gato esta genial!!
Hola amigo Héctor, super pensamientos los que tienes sobre pasar tiempo con tu hija y esposa. Ese es mi ideal no tener que pedir permiso a nadie para disfrutar de mi familia y tener los recursos económicos para hacerlo.
Gracias por compartir tu experiencia a través del post y permitirnos saber que si se puede lograr.
Hola he leído todo tu blog probablemente no se me haya “pegado” todo pero creo que me has dejado una espinilla clavada voy a seguir leyendo eh investigando, y felicidades por tu bebé que esta próximo a nacer.
Muchas felicidades Tocayo por tu bebé que viene en camino!
Saludos